La persona a quien amo de verdad se marchó para siempre. El príncipe no iba a regresar para despertarme de mi letargo mágico con un beso. Al fin y al cabo, tampoco yo era una  PRINCESA, por lo que ¿cual que era el protocolo de los cuentos de hadas para otros besos ?Acaso gente común y corriente  no necesitaba romper ningún conjuro?
Tal vez sería fácil, quizá seria agradable.. A lo mejor no me daría la impresión de estar traicionándolo después de todo.Además, a quién traicionaba en realidad. Sólo a mí misma.